Mantra * Om *

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miércoles, 7 de octubre de 2009

Retenidos en plena montaña.



http://es.wikipedia.org/wiki/Quich%C3%A9_%28Guatemala%29#Danzas_Folcl.C3.B3ricas

Mirando los archivos de fotos, encontré ésta de la época de la madera. Ahí estoy con el clasificador de madera (Fidel), mi amigo Víctor y un empresario de aserraderos.
Como veréis, tenemos cara de felicidad. Ya estábamos liberados.
Estuvimos durante tres días retenidos en las montañas del “Quiché”, por temas políticos de ex guerrilleros, que reivindicaban derechos.
Fue una experiencia inolvidable. Teníamos que dormir debajo del picop, en unas temperaturas de 40, 45 grados. No teníamos comida, bebida, de nada. Solo llevábamos dinero en dólares americanos, para la compra de madera.
Cierto es que los señores ex guerrilleros, fueron atentos, comprensivos y nos permitían andar libres por los lugares cercanos al cierre y control de la carretera.
Los zancudos eran visitantes diarios, me tenían pero bien comidito. Y, con el hambre que pasábamos, era una desesperación.
Al segundo día, me adentré hasta el pueblo más cercano, dentro de los límites marcados por ellos. Cuál fue mi sorpresa de encontrar una chabolita, con unos dibujitos de bolsitas de papas y alguna agüita.
Ahí entré de cabeza, como toda aldea indígena, está repleta de niños, mujeres, vestidos con sus ropas típicas.
…Yo tengo cierta mano derecha para entrar en los corazones de la gente, y aprovechando esa magia..

Señora como la va, que nenes más lindos. ¿Son todos de casa?
Deles unas patatitas y caramelos, yo un agüita fresca. Por favor. ¿No tendrá algo de comer?
Coño, preparó un pollito con arroz y unas tortillitas de maíz.  Como sería el olor que aquello desprendía, que al ratito estaban mis compañeros dentro de la chabolita. Jajajajajajajajajajajajajaja.
Veníamos a ver donde andabas, no sea que te pasara algo. Ya, ya, anda sentaros y vamos a comer algo. He viajado por varios países del tercer mundo y manejo las situaciones extremas con mucho tacto.
Terminada la primera comida rica de la retención, dejamos una propina, que fue salvadora para los días próximos.
Una semana antes, en ese lugar habían quemado a varias personas (Gringos), por el mismo motivo de hacer presión al Gobierno.
Recuerdo que llevaba una camiseta (playera), con motivos americanos, no tardé en quitarla ni un respiro. Cierto es, que notaron que éramos españoles y el trato fue diferente.
No había señal de celular y por lo tanto no podíamos hablar con nadie. Yo, estaba dispuesto a pedir a nuestra embajada española, que nos sacaran de ahí ya.
No se sabía cuánto tiempo nos tendrían retenidos contra nuestra voluntad y como se pondría la situación, ellos cargaban ametralladoras, fusiles, pistolas, machetes. Coño, que tenias miedo.
Ya una mañana, llegaron unos camiones con militares, policías, y parece ser que llegaron a un acuerdo. Hacía las tres de la tarde, nos fueron dando salida a unos 50 carros (coches), que estábamos ahí retenidos.
Me sirvió para  darme cuenta, que hay que viajar con Dios, sentimientos nobles, buen corazón y dinero. $$$$$$$$$$$$$$$$$$$$$:Jejejejejejejejejejejeje.
¿Dónde había un cajero en esas montañas del “Quiché”?
¿Os imagináis un cajero en plena selva?
Mamita de mi corazón.
Hasta otro día.
Bye.